Una condena criminal puede tener efectos negativos que siguen al condenado por toda la vida, cerrando puertas de oportunidad y haciendo que la vida sea mucho más difícil. Aun así, un acusado de un crimen no necesariamente va a ser condenado. Si usted fue acusado de manejar bajo los efectos de alcohol, tiene la oportunidad de presentar una defensa contra los cargos en la corte. Estas son algunas de las defensas más comunes contra cargos de conducción en estado de ebriedad.
Falta de sospecha razonable
Una defensa común contra los cargos penales es que la policía que paró al acusado no tenía sospecha razonable adecuada. La Constitución de los Estados Unidos requiere que la policía tenga una sospecha razonable de conducta criminal antes que puedan parar a alguien en la calle.
Para que sea legítima, la sospecha razonable tiene que ser basada en algo concreto. No puede ser basado solo en la intuición o una suposición.
Fallo del alcoholímetro
La policía usa una máquina que se llama un alcoholímetro, que mide el nivel de alcohol en el cuerpo basado en la exhalación. Los fiscales usan los resultados de estas examinaciones como evidencia en las acciones legales contra los acusados. Pero estas máquinas no son siempre confiables. Si hay un fallo, es posible que su abogado pueda desafiar la admisibilidad de esa evidencia (enlace en inglés).
En algunas circunstancias particulares, también es posible desafiar las acciones de la policía si no siguieron el protocolo oficial sobre cómo transportar o almacenar la evidencia (como la sangre examinada del acusado, por ejemplo).
Afrontar las acusaciones penales es un camino largo y difícil, sin promesa de éxito. Pero si logra obtener una victoria en la corte, valdrá la pena de todos los días y semanas de preparación con su abogado.